Poco antes de llegar al muelle de la ciudad de La Paz, hay un camino que lleva a Puerto Balandra, paraíso de buceadores con equipo o simplemente con visor y esnórquel.
Hay una línea rocosa que limita la playa y luego una serie de cavernas y arcos de piedra, formaciones muy curiosas que componen un esplendoroso fondo submarino. En los esteros abundan los bancos de atún, barrilete, lisa, sierra, barracuda, cazón y tiburón verde, así como las ostras perleras.
La principal atracción en el puerto es bucear, acampar, nadar, remar, velear y pescar.
A un kilómetro de distancia de la ciudad de La Paz se encuentra la hermosa península de El Mogote, donde se producen unas ciruelas tan sabrosas que la gente afirma que "quien del Mogote ciruelas prueba, a La Paz no deja". En esta peñíscola se ha fincado un fraccionamiento con canales que permite a los dueños llegar hasta ellas a bordo de sus lanchas, desde el mar. También se encuentra un cerro que ostenta la caprichosa forma de una endeble cabeza humana, por lo que lo llaman el Cerro de la Calavera.(Texto de:playasmexico.com.mx)
